El señor de los anillos

Hace cuarenta años Audi presentaba su primer modelo coupé en el salón de Frankfurt, aunque para verlo rodar por las calles hubo que esperar casi dos años más, hasta 1971.

El 100 coupé GT era una versión fastback del sedán dos puertas, a su vez derivado de la berlina, aparecida en 1968, y debe su nombre a la potencia en caballos que ofrecía la versión de alto de gama. Si hasta estuvieron muy cerca, según el gossip de la época, de llamarlo Audi 100PS. Pensar que su derivado actual, el A6, hoy ya anda acariciando los 600 CV en su versión más escandalosa…

La línea de este Audi se inclina decididamente más por lo elegante que hacia la excentricidad. Es relativamente discreto y muy bien proporcionado, mostrando un equilibrio de volúmenes que le confiere una belleza atemporal. Sin embargo, hay que decirlo, tiene líneas que recuerdan a un Aston Martin DBS, del cual seguramente han tomado inspiración, aspecto que se nota sobre todo en los elementos dispuestos en la vista plena trasera.

Hay también quien lo asocia a un auto latino, diciendo (no sin razón) que es el más italiano de los coupés alemanes de la época junto al BMW 3.0 CS. Nuestro amigo GF seguramente lo encontrará parecido a su querido R17, y todos podremos opinar… La línea italiana es innegable, el R17 es considerado por los autores de este espacio una gloria del diseño, y el Aston Martin DBS nos parece un auto muy logrado, así que como luego de un tiempo las causas prescriben, le perdonamos a los muchachotes alemanes el desliz y por ser su primer coupé, podemos decir que hicieron un excelente trabajo, y gracias a ello, lo estamos hoy recordando.

El 100 coupé GT, se lanzó con una mecánica de 1.9 litros, dos carburadores y unos 115 CV de potencia, que se redujeron en la segunda versión de 1973 a 112, ya que le quitaron un carburador (mala onda…).

Estuvo en producción desde 1971 hasta 1976 y se ensamblaron algo más de 31.000 unidades repartidas en tres series a lo largo de su exitosa vida comercial.