Un automóvil Mathis de 1931, que se mantuvo oculto en Francia desde la Segunda Guerra Mundial hasta la actualidad, será ofrecido al mejor postor por la casa Silverstone Auctions durante el evento Silverstone Classic que tendrá lugar el próximo fin de semana en el renombrado circuito de carreras británico.
El ahora raro y deseable Mathis PY 7CV pasó 72 años preso del pestillo de un galpón en el norte de Francia, escondido originalmente de las manos alemanas enemigas para las que todo era plausible de convertirse en botín de guerra.
Luego de años de invernar, el Mathis fue descubierto en 2014 por su actual propietario, quien lo adquirió junto a otros dos automóviles pertenecientes a la misma colección. Este Mathis, una verdadera cápsula de tiempo, nunca fue movido de su hábitat desde mediados del siglo pasado y hasta hace poco tiempo atrás permaneció apoyado sobre ladrillos.
Hoy en día, más de ocho décadas después de haber sido fabricado, es considerado un ejemplar muy raro y original de la marca fundada en 1910 por Émile Mathis, un vendedor de autos de la región de Alsacia que representó exitosamente marcas como Fiat, De Dietrich y Panhard-Levassor, devenido luego en industrial. Antes de comenzar a agregar su apellido a los autos que fabricaba, Mathis contrató los servicios de Ettore Bugatti para desarrollar dos modelos producidos bajo la marca Hermes y fabricados durante los años 1904 y 1905.
La fábrica de Mathis en Estrasburgo se convertiría en su momento en la cuarta en producción de automóviles en Francia, completando más de 10.000 unidades en 1927, con Citroën como marca enemiga, antes de eventualmente tener que cerrar sus puertas en 1950.
Este «barn find», producido en el año 1931, presume estar en un envidiable estado de conservación, sin puntos de corrosión graves, y con todos sus elementos mostrando la inevitable acción del tiempo. Este Mathis fue trasladado días atrás al Reino Unido, a tiempo para ser ofrecido por primera vez en su historia a remate.
Pintado de negro y verde, con un interior en tela gris y su techo de vinilo negro, se cree que este sedán completó en 85 años los 40.000 kilómetros que acusa su odómetro. Su motor de cuatro cilindros tiene una capacidad cúbica de 1.226 cc y está unido a una caja de tres velocidades.
El director de Silvertone Auctions, Nick Whale, comentó más detalles acerca de este Mathis: «es un descubrimiento extraordinario. El auto es muy auténtico, y es extremadamente raro encontrar algún sobreviviente en este estado de preservación. Lamentablemente no tienen papeles de propiedad y apenas lo acompañan unas fotógrafías antiguas de sus mejores años, pero su historia y la vida que le tocó vivir lo hacen un lote ideal para alguien que le entregue al menos un poco del amor que este Mathis echó de menos durante todos estos años».
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Necesario off topic: hoy salí de casa para venir al trabajo y había estacionado en la esquina de casa un HF Integrale 16V color azul oscuro en estado impecable, interiores, todo, volante Momo y todo lo que se les ocurra. Había llovido a la noche y tenía las gotas de lluvia todavía frescas. Casi me muero. Dí no sé cuantas vueltas alrededor del coche mirando todo los detalles y me vine a laburar con una sonrisa infinita pensando que hay gente que todavía tiene buen gusto y en vez de gastarse 25 o 30 mil euros en una porquería TDI lo hace en algo que vale la pena.
Esto si que debe ser raro, raro, tanto más cuando el vehículo parece bastante entero.
Intentando achicar mi ignorancia sobre el Solyto (pero bien acompañado) encontré al VL333, un tres ruedas aerodinámico muy interesante relacionado con Mathis.