Nos teníamos toda la fe del mundo, y lo logramos: dimos finalmente con las fotos del Baufer, imponente muestra de creatividad, furia y desparpajo del diseño autóctono de los setenta.
El lápiz involucrado en esta transformación es ni más ni menos que el de nuestro conocido Jorge Ferreyra Basso, quien me confirmó durante las 1000 Millas Sport su paternidad sobre el objeto que hoy presentamos.
El auto estaba construído por Alain Baudena, y se presentó al público en 1974. Tenía la particularidad de ser uno de los pocos, o el único entre los tuneros setentosos, en implementar cambios estructurales de relevancia respecto a su versión original, la maravillosa Coupé Serie2. Estos cambios incluían un considerable acortamiento de la distancia entre ejes, operación que requería una importante faena, además de bajar su altura total en mas de quince centímetros, proporciones que para un diseñador, son inconmensurables. Se trabajó en la zona inferior a las ventanillas, acercando notablemente el pasarruedas a la línea de cintura del auto, lo que le da un aspecto mucho más deportivo que al auto de serie.
A pesar de las mutaciones, la silueta del Baufer luce armónica, sobre todo su parte anterior que presenta una pieza única moldeada en aluminio, y que acompaña estilísticamente las creaciones de Grandío y Lopez (Chevrón), y de alguna manera el menos osado Delfín de Perello Hnos.
En la cola, la zona más controvertida, se nota un admirable tesón en intentar encajar los faros de Fiat 125 sobre la muy sutil franja de luces que alojaba a los de la Coupé Chevy, representa un punto de conflicto y de seguro debate con el diseñador, que a esta altura está más allá del bien y del mal, así que se lo preguntaremos apenas nos topemos con él. ¿Habrá sido para equilibrar las masas debido a la altura que ganó la zona por el agregado del «alettone«?
Este último elemento, junto a las persianitas de luneta, tan en boga por aquellos años, lo dejamos para otro día.
El interior es de auténtica fábula, y se lleva todos los premios más que nada por lo osado, y el coraje de proponer algo completamente nuevo con las dificultades técnicas que nos imaginamos habrán tenido que sortear para dar con esa forma y mantenerla.
Las fotos del otoño, retratan al retoño que nada tiene de Ñoño, y dan lustre a un mito de nuestro tuning setentoso. Con ellas saldamos una gran deuda pendiente con los lectores de la zona de Rosario, que habían pedido este modelo hace ya algunas semanas.
- Citroën Camargue - 05/04/2020
- Buon compleanno maestro! - 26/09/2018
- Don Alberto - 21/09/2018
Alain Baudena hoy trabaja en Rekclus construyendo replicas de monopostos pre guerra y otros autos increibles, les dejo el link de la pagina de reklus http://www.rekluscars.com/
Tantísimas gracias Hernán!
Recordaba que tenía más modificaciones que el Chevron pero no sabía que eran tantas. Algo que me llamó la atención, ya que era el único por estos lares, el cubrefiltro de aire (por llamarlo de alguna manera) en negro mate que era solidario al motor y sobresalía por encima de la superficie del capot, típico de los muscle car americanos de la época.
Ameritaría una charla con Don Jorge (sigo pidiendo).
Gracias again.
¿que necesitas del R12 Alpine? tuve uno completamente restaurado y mucha data del modelo, quedo a disposición
Lea hasta el final de la nota amigo, y se enterará.
¿Alguna foto del frontal?
No le encuentro las teclas a los levantavidrios.
O tiene sacamúsculo y le sacaron la manija para la foto?
Cuanto talento perdido… Donde estar esta gente hoy…
Atte.
NS.
se sabe algo en la actualidad de este experimento.