Tarde de mayo, tarde con sol otoñal, la bajada equivocada de la General Paz y el premio por usar (mal) el instinto y no el GPS: este camión Oldsmobile, en el cruce de las calles Griveo y Joaquín V. González, en el porteño barrio de Villa Devoto.
Cruzarse con un pesado de esta extinta marca del conglomerado estadounidense no es cosa de todos los días. Podrán pasar años o una vida hasta el próximo. Y esos creemos que ya son pergaminos suficientes como para compartirlo con ustedes en vadeRetro.
Pero hay más. El chasis de este Oldsmobile 37/38, con columna de dirección a la derecha, soporta un tanque cisterna con un remate de cola muy perfilado, perfectamente proporcionado con el volúmen delantero y la cabina, y absolutamente fiel a su época. Hay indicios de que durante su vida activa, este camión se ocupó de transportar el líquido elemento enemigo del fuego, probablemente en un cuartel de bomberos de Rosario, ciudad que conserva grabada en la chapa patente delantera, junto a sus antiguos números y la letra «ese» que identificaba a los autos registrados en la provincia de Santa Fe. Si fuera así, habrá salvado tantas vidas y bienes que ahora merece que alguien haga lo mismo con él.
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