La casa de las esculturas y la escultura rodante cincela sus pliegues de misterios. ¿Será la casa de un artista? ¿O la de un coleccionista de arte? ¿Es cierto que allí vive un dirigente político?
Lo rigurosamente cierto es por allí merodeaba un celoso vigilante, quien se sintió amenazada su labor porque este servidor estaba tomando fotos de la casa de Holmberg al 1700, en el barrio porteño de Villa Ortúzar, haciendo un vago registro de sus esculturas y del Kaiser Carabela que parece estar ahí para acompañar la escenografía, más que para salir a dar una vuelta en lo inmediato. El policía regordete me invitó a dejar de fotografiar el pintoresco escenario y retirarme a la brevedad.
Ya saben, la sección “un día, un auto” trajo consigo el descubrimiento de uno de los oficios más peligrosos del mundo…. Ya sufrimos a perros mordedores, otros rompedores de pantalones, alambrados con el mismo berretín, la amenaza de la ley, dueños enojados que se ensañaron con alguna cámara y algún otro que salió blandiendo un bate de béisbol.
Casi caídos en cumplimiento del deber, sobrevivientes de 1.484 días…
Fotos: Diego SperattiVadeRetro recomienda las siguientes notas relacionadas:
La foto que muestra toda la escena (la casa, el porche, el coche, las estatuas) lo explica todo.
La compraría mañana mismo y sería una foto del pasado.
Agradezcamos la construcciòn del toldo ad-hoc que reemplazò a la lona que lo cubria hace unos años.