Las cien tripulaciones que participaron en la reciente edición del rally Flying Scotsman debieron soportar lluvia, granizo, aguanieve y también nieve mientras realizaron el recorrido de esta octava edición, atravesando las regiones de Lincolnshire, Yorkshire, Northumberland en Inglaterra, para luego, ya en territorio escocés, completar el camino hasta Gleneagles.
Después de dos triunfos consecutivos del Bentley del especialista en la marca William Medcalf, el Talbot 105 Alpine 1931 de Gareth Burnett y Martyn Turner cruzó como ganador la línea de llegada, en la edición más exigente de los rally Flying Scotsman disputado hasta la fecha.
Luego de la entrega de premios el ganador pidió el micrófono: «estamos tan encantados con haber ganado el rally como agradecidos con la Endurance Rally Asociation por haber organizado un evento tan fantástico. También me gustaría agradecer a todos los competidores por participar en estos autos vintage tan exquisitos y hacer con ellos todo para lo cual fueron construidos. Es un placer inconmensurable estar en el camino a bordo de ellos».
Los escoltas fueron John Abel y Leigh Powley en un Lagonda LG45 1937 y terceros en la suma de penalizaciones terminaron Stuart Anderson y Andy Pullen a bordo de un Bentley Derby IV de 1938.
Otro premiado fue el auto más antiguo de la competencia, el Knox Type R 1911 que completó cada una de las pruebas contrarreloj, la regularidad y los desafiantes caminos de montaña dando un gran handicap de edad frente a autos hasta treinta años más jóvenes.
Fred Gallagher, director de rallies en la ERA (Endurance Rally Association), declaró: «nuestros competidores soportaron cada condición climática imaginable durante tres intensas jornadas de manejo, sobre terrenos muy duros, y aun así mantuvieron alto el espíritu y el disfrute del momento. Nuestro agradecimiento va para cada una de las tripulaciones y los jueces, quienes hicieron que una vez más este sea un fantástico evento para los entusiastas de los autos vintage».
También se entregaron dos premios especiales en la cena final en el lujoso Gleneagles Hotel. El ganador del concurso de elegancia resultó el Alfa Romeo 8C de Shane Houlihan y Richard Pain.
En tanto el premio al espíritu deportivo fue para Matthew Abrey y Jasper Hulscher en el Ford A 1931, quienes debieron sacar el motor y reparar el embrague terminando la jornada del sábado. Un nuevo embrague partió desde Norfolk, Inglaterra, hasta Escocia y llegó a primera hora de la mañana. Todas las manos ayudaron para rearmar el Ford A y la tripulación consiguió incluso cruzar a tiempo el primer control horario de la etapa del domingo.
La novena edición del Flying Scotsman Rally se disputará entre el 31 de mayo y el 2 de abril de 2017, largará desde Slaley Hall en Northumberland, y llevará a los participantes por muchos más kilómetros en suelo escocés que la edición que acaba de concluir.
Para más detalles, resultados y también los últimas novedades sobre el próximo rally Pekín-París se puede visitar la web de Enduro Rally.
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