Con el mismo oportunismo con el que se inaugura en Buenos Aires una estatua de Messi el día después de que la sacó del estadio en un penal para definir el campeón de la Copa America, nosotros decidimos peregrinar hoy al santuario del Opel K180, después de que nuestros lectores lo destrozaron días atrás en el post del K 180 en venta.
Imaginando los tesoros escondidos detrás del portón, dormimos tranquilos. Sólo nos queda por encontrar el altar a Ricardo Arjona.
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Me recuerda a los dibujos de uno que conozco, no voy a dar muchas pistas, solo que su apodo empieza con Mor y termina con gan.
Parece que le sacaron la escalera…
Guevarita, mire que gaste plata para que me enseñen……….no hubo forma. Si uno es malo es malo.
No se tire a menos morgan, tiene trabajos logrados, el Seven salió de prima…
¡LO PARIÓ! A la hora de criticar NI LA JOYA MÁS PRECIADA soporta indemne las CRITICAS. Y resulta que después se encuentran con los restos de un Austin Seven y se HACEN PICHÍ A CHORRITOS……..
Se me vino aquella imagen del Ecce Homo mal restaurado. La trompita es lo que mejor le salió. Un atenuante: no debe ser fácil pintar sobre chapa acanalada. El detashe para mi es el look estarquijoch.
tiene el merito de ser mas feo que el original………..me gustaría que el griego haga un análisis de las proporciones y la perspectiva de semejante obra de arte…….
Es para destrozarlo. Injerto y calidad cero.