Hace dos días en mi cuenta de facebook colgué dos fotos de este auto y tuvo muchísima repercusión, así que en nuestro regreso a la web, decidimos reflotar esta nota de hace un año atrás para que nuestro público niponófilo se deleite con este modelo único: El Datsun 200SX o bien “Silvia”.
La segunda generación de este coupé vio la luz a mediados de los setenta y se la apagaron pocos años después con la aparición de nuestro conocido 180SX, también llamado “Silvia” en algunos mercados.
Para un diseñador ver un objeto así por la calle es algo glorioso, sencillamente fuera de toda lógica y desde ya representa una declaración de principios por parte de los japoneses: no queremos pasar desapercibidos….Vaya si lo lograron.
La cosa ya venía espesa con las anteriores creaciones como el Cherry X1-R, o el Sunny Coupe que al menos resultaban más proporcionadas y compactas además de expresar el mismo tema pero en un formato más amigable.
Esta es sencillamente un despilfarro de provocación. Es como un chiste verde en la sobremesa con la abuela de tu novia, un eructo en una biblioteca o un grito de gol en la popular equivocada…
Gracias por la magia, gracias por el 200SX y sus hermanitos menores, ya retratados en estas páginas tiempo atrás.
Aprendamos y disfrutemos de los buenos autos de una época que ya no vuelve. Por eso nos empecinamos en escribir acerca de ella.
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Veo con alegría que juntaron la plata para pagar la boleta de la luz, porque se me iluminó la compu.
Que bueno tenerlos de vuelta, grasisadió!!!
El japonesito no está muy lindo, pero tiene sus encantos, el frente parece una mezcla de tres o cuatro diferentes pero me agrada en su mezcolanza y el tablero me parece muy atractivo.
No se te ocurra mirar el reloj allá abajo en tráfico denso porque te la das de frente.
Coincido con weelbase.
Ahhhhhhh, menos mal, volvió la luz !
Antes que nada, gracias por el retorno a esta sobremesa virtual. En cuanto al muchacho en cuestión, al menos en mi opinión, tiene un interior muy interesante para su época, el torpedo escapa al rectangulito con instrumental de muchos de sus coetáneos (especialmente entre generalistas y económicos), la trompa me resulta indigerible, es como que dentro del marco (muy prolijo) que forman el paragolpes y la moldura del capó, dijeron tenemos que embocar faros y parrilla, y entraron …..así; al lateral, yo le modificaría la forma del guardabarros trasero, ya que de por si, es como muy pesado ese sector (mas con el parante tan grande), pero, entre las ventanas sin parante y el pliegue distinto, hacen un perfil interesante (después vemos si lindo o no), y la parte de atrás, dentro del «aquí estoy» que despliega el auto, lo encuentro muy prolijo y razonable. Me parece que el Ford Scorpio del 94 le tomó prestadas las luces y las puso en el culo de hipopótamo que tenía el auto dando como resultado un injerto fulero con ganas.
Bien ahí…; genial esa linea lateral creando esos volúmenes superpuestos. Eso es darle personalidad al lateral no el pliegue pedorro de los MB clase A…
me intriga que parte de la planta se habrán fumado estos ponjas……..flores seguro que no.
Sí, algo tan feo no podía pasar desapercibido.
Parece que tenían reservado el nombre Silvia para autos raros y feos, excepto este de 1965 (aparentemente diseño de von Goertz) que mas o menos zafa:
http://www.curbsideclassic.com/wp-content/uploads/2012/05/nissan-silvia-csp311.jpg
Albert, dejá de mirar la Fulvia dale.
Fuente de inspiración para los faros traseros del Camry 97