Una motocicleta muy llamativa se unió recientemente al sector «La Historia de la Motocicleta» del National Motor Museum, en Beaulieu, Inglaterra. La BSA A10 Golden Flash de 1953 ya se encuentra robándose las miradas de los visitantes de Beaulieu gracias a su glamorosa pintura dorada y el brillo cromado de su tanque de combustible. Ese color y ese esquema de pintura no son parte de una personalización, ya que esta Golden Flash se conserva exactamente como salió de fábrica, más de 60 años atrás.
La Golden Flash fue donada al National Motor Museum por su generoso propietario y se encuentra en perfectas condiciones, habiendo recibido una meticulosa restauración a lo largo de los años. Tal como está, se puede apreciar en todo su esplendor la quinta esencia del diseño motociclístico de la inmediata posguerra.
Haciendo honor a su nombre, esta Golden Flash se ve increíble con su pintura dorada, pero no todos los ejemplares de este popular modelo fueron pintados con estos tonos. El color standard era el negro, mientras que la opción en color dorado tenía curiosamente el nombre de referencia «beige» en las publicidades de BSA en la época. Sin embargo, la potente combinación de nombre y color ayudó a cimentar el lugar de este modelo en la historia.
Lanzada en 1950, la A10 Golden Flash tomó prestada la fama de su antecesora, la BSA A7, pero ofreciendo más potencia y prestaciones para competir con los modelos de Triumph, la marca archirrival en la época. Su evolucionado motor bicilíndrico de 646 cc era nuevo en este modelo, erogando 35 caballos, suficientes para llevar a cualquiera de sus propietarios a superar los 160 km/h de velocidad máxima. No todos los usuarios se interesan por los límites de prestaciones de sus motocicletas, y muchos preferían agregarle un práctico sidecar para llevar un pasajero extra o mayor cantidad de equipaje.
La Golden Flash recibió una serie de mejoras estéticas durante los años cincuenta. Este ejemplar del año 1953 está equipado con suspensión trasera de émbolos mientras los compradores tenían la posibilidad de elegir también un cuadro rígido. Luego se ofrecería la suspensión trasera basculante.
La Golden Flash tiene ya su merecido lugar en el sector «The Motorcycle Story», en el National Motor Museum de Inglaterra.
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Lindo fierro. La vista lateral es espectacular, como la restauración, incluyendo el «tax disc» de la época.