Pocos reglamentos del automovilismo han generado un grado similar de dramatismo puro y la efervescencia que consiguió el rally en la controvertida era de los «Grupo B», que trajo consigo niveles nunca vistos de prestaciones de súper autos a las Pruebas Especiales de las competencias disputadas alrededor del mundo. Aunque esta categoría sólo existió durante cuatro años, su impacto en el deporte y, de alguna manera en una conciencia más amplia, fue completamente desproporcionada.
Habiendo ganado apenas una competencia dentro del Campeonato Mundial de Rallies de 1984, con el veterano 037 de tracción simple, Lancia optó por desarrollar un reemplazo que se estrenaría en la última prueba de la temporada 1985. Bautizado como Delta S4, el nuevo auto tenía un lejano parecido con su similar de uso civil. En la predecible y estrafalaria moda de los «Grupo B», se reemplazaba la estructura monocasco de acero del Delta convencional por un reticulado de tubos de níquel-cromo, en el que el motor se reubicaba en posición central posterior. El S4 también utilizaba un ingenioso sistema de «doble sobrealimentación» donde un supercargador operaba en secuencia con un turbocompresor para reducir el «turbo lag» y mejorar las reacciones, mientras la fuerza del prodigiosamente potente motor con 550 caballos se transmitía al piso a través de un sofisticado sistema de tracción integral desarrollado por Hewland.
Se construyeron unos 28 Delta S4 del Grupo B, de los cuales la mayoría fueron inscriptos en las pruebas por el equipo Martini Lancia de fábrica, y el resto por los semi oficiales Jolly Club y Griffone. Adicionalmente, se construyeron 200 ejemplares «Stradale» para poder homologar la versión de competición.El S4 que vemos en las fotos y que RM Sothebys ofrece al igual que el Fiat 8V de 1954 en el remate virtual «Open Roads, The European Summer Auction», es el chasis #207, que junto a su gemelo #202, fueron los utilizados por el equipo oficial Lancia Martini Racing en aquel debut en el «Rally RAC» de Inglaterra, fecha final de la temporada 1985 (ver video).
Mientras el #202 le tocó en suerte a Henri Toivonen/Neil Wilson, este chasis #207 cayó en manos de Markku Alen/Ilkka Kivimäki, quienes escoltaron a menos de un minuto a sus compañeros de equipo, habiendo obtenido entre los dos 41 de los 63 primes que tuvo aquel dominante estreno de los Delta S4 en el rally británico.
En la temporada 1986, el chasis 207 volvió a ver acción dentro del «Grupo B» pero en el Campeonato Europeo, aún bajo los colores de Martini pero con la atención del Jolly Club, siendo su primera participación la del «Ypres 24 Hour Rally» disputado en Bélgica (ver video), en manos de Fabrizio Tabaton y Luciano Tedeschini. Desafortunadamente un accidente impidió que llegaran a la meta de aquel rally.La siguiente aparición del chasis 207 fue en el «Halkidiki Rally», en Grecia, ya bajo la inscripción de la escudería Griffone pintado en la decoración que combinaba colores negros y dorados y el logotipo de la petrolera ESSO. Nuevamente en manos de Tabaton-Tedeschini, consiguieron la victoria en la general, el primer triunfo para este automóvil. La temporada 1986 de este chasis llegaría a su fin con el Rally de Antibes, en Francia, donde una vez más con Tabaton/Tedeschini bajo sus mandos, debieron abandonar por problemas mecánicos.
El Chasis #207 continuó su carrera deportiva a lo largo de las temporadas 1987 y 1988 ya en las manos de Gian Batistta Rosella en el Campeonato Europeo de la categoría Autocross.
Con una historia conocida de propietarios desde entonces hasta el día de hoy, el pedigrí de los últimos y trágicos tiempos del «Grupo B» de rally y una certificación de Abarth Classiche, este ejemplar está disponible a la venta en la subasta a través de ofertas digitales que cerrarán el próximo 22 de julio. RM Sothebys estima su precio de venta entre 1 y 1.25 millones de dólares.
Fotos: RM Sothebys
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